Un estudio reciente sobre más de 25000 personas realizado en el UK Biobank sobre personas no deportistas han demostrado no solo que no hay una cantidad demasiado baja de ejercicio, si no que la aportación de pequeños estímulos de alta intensidad en la vida cuotidiana pueden aportar mucho a nuestra salud.
Se monitorizaron a distintos sujetos durante casi 7 años de duración y se obtuvieron los siguientes resultados:
Una media de 2-3 estimulos diarios de 1 a 2 minutos de duración como podían ser:
- Subir las escaleras de casa.
- Correr para coger el autobús.
- Llevar las bolsas de la compra.
Arrojaron unos datos de casi un 40% menos de mortalidad por cáncer y un 49% menos de muerte cardiovascular.
¡Una auténtica pasada!
Posteriormente se estudiaron mas de 65.000 personas esta vez si deportistas y los resultados fueron parecidos.
Es decir: una vida activa aporta beneficios tanto a deportistas como no deportistas.
