Un equipo de investigación sueco ha publicado recientemente los resultados de un estudio donde en 1968 se realizó una prueba de ejercicio físico en bicicleta estática a 191 mujeres de mediana edad (≈55 años) para medir su capacidad cardiovascular. Posteriormente se realizaron 6 exámenes para la detección de la demencia en los años: 1974, 1980, 1992, 2000, 2005 y 2009.
¿Los resultados?
Las mujeres de mediana edad con una buena forma física presentan casi un 90% menos de probabilidades de sufrir demencia frente a las mujeres moderadamente atléticas
Dentro de la muestra del estudio, un total del 44% de las mujeres desarrollaron demencia; dentro del grupo de «muy buena condición física tan sólo lo desarrollo un 5% de la muestra mientras que en «condición física moderada» fue del 25% y en «baja condición física» fue del 32%. Dentro del grupo de aquellas que ni siquiera pudieron finalizar la prueba con la bicicleta encontramos un porcentaje de desarrollo de demencia del 45%.
Además, la mujeres con una buena condición física desarrollaron la enfermedad un promedio de 11 años más tarde que las mujeres con una condición física moderada o bien en una media de edad de 90 años, en lugar de 79.
A pesar de ser necesarios más estudios para estudiar el efecto de la actividad física en el desarrollo de la demencia, la actividad cardiovascular de alta intensidad debería plantearse como estrategia de prevención.
Bibliografía
«Midlife cardiovascular fitness and dementia» Helena Hörder, PhD, Lena Johansson, PhD, XinXin Guo, MD, PhD, Gunnar Grimby, MD, Silke Kern, MD, PhD, Svante ¨Ostling, MD, and Ingmar Skoog, MD. Neurology® 2018;0:e1-e8. doi:10.1212/WNL.0000000000005290